viernes, 16 de enero de 2009

Cartas para quien pretende enseñar

Por: Camilo Acosta
Cartas para quien pretende enseñar, es un libro escrito por el profesor brasilero Paulo Freire, él nació el 19 de septiembre de 1921. Freire conoció la pobreza y el hambre durante la Gran Depresión de 1929, una experiencia que formaría sus preocupaciones por los pobres y que le ayudaría a construir su perspectiva educativa, una de sus entregas que referimos aquí la recomendamos por lo seiguiente. 

En este libro Paulo Freire muestra uno de sus mejores momentos de producción, discutiendo con claridad política, radicalismo y buen gusto lo concreto de "ser maestro".  Problemas relevantes de lo cotidiano de la maestra: disciplina, relación entre teoría y práctica, una nueva comprensión de lo que es enseñar y aprender, el artificio ideológico de la denominación tía-maestra, son discutidos en el marco del gusto por una escuela democrática y del compromiso con la transformación social.

Las cartas son un desafío para "pensar la práctica" y un testimonio de que esto es posible y necesario. Educadores e investigadores encontrarán, en la lectura de este libro, una invitación para que se vuelvan productores de comprensión de las palabras del autor. Es, además, un bien cuidado ejemplo del uso de la dialéctica en la producción escrita.
Hoy la educación es pensada desde los saberes pre-establecidos por formatos de ministerios y secretarias en toda latinoameriaca, pero la pregunta constante es ¿de donde provienen estos tipos de educación?, la respuesta es clara y puntual de copias en espacios que fueron pensados desde sus entornos y que por tal motivo fueron exitosos, pero al descontextualizarlos no se producirían los mismos resultados.
Freire plantea que no contextualicemos los procesos, sino que tengamos claridad evaluativa de los que hacemos, pensar en evaluaranos es pensar en corregirnos, donde radica una verdadera evaluación, en la vivencialidad de los entornos, lo que permite darnos la entrada a un desaprensisage que es importante para aprender cada dia en un contexto diferente.

El desaprendisage planteado por freire nos dice que tenemos que eliminar toda certeza que nos planteemos puesto que la educación como el conocimiento esta ligado al crecimiento socio-político de un entorno que crece con todas sus aristas y lo que hoy es valido como negro mañana ya no lo sera, el dudar y estar guiando las dudas en encaminarle a una investigación diaria que le permite al estudiante crear procesos y eliminar certezas, por ende el educador se convertirá parte del proceso y se vnculará haciendo sus propios análisis al procesos.

No todos los alumnos proceden igual, pero no todos los contextos son iguales, los análisis que se plantean para una transformación de individuo no es el de uniformar, sino el de ir por el camino de la pruralidad que permite tener multiplicidad de visiones, esas visones que dejan en desde de la polarización bipolar del pensamiento maniqueista y manipulado por los juegos de poderes que se encuentran en los mismos entornos educativos especialmente en el colegio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Con el concepto de desaprendizaje recordé una corriente de escuelas europeas. Sinceramente no recuerdo el nombre ni detalles con exactitud pues esa idea ya tiene tiempo de existir. Pienso que es importante que se logre un proceso de enseñanza que incentive la creatividad y el desarrollo personal. Conformar un programa de estudios que logre transmitir al alumno los conocimientos científicos duros pero que también de libertad es una mezcla perfecta para la innovación y el avance.

Sobre escuelas aquí en México puedo decir que la experiencia es variada. Existen escuelas de paga donde se procura introducir estos modelos e impulsar el liderazgo y la creatividad, pero finalmente no dejan de ser negocio (Tec, Ibero). Hay otras universidades públicas que sí procuran este patrón y tienen un muy buen nivel (UG, UANL) mientras que otras se pasan de condolientes e incentivan la holgazanería (Unam) o que simple y sencillamente tienen una calidad deplorable (gran número de escuelas públicas de educación básica) y que además están sujetas a intereses políticos. La educación es fundamental para el desarrollo personal y del país.