Por: Camilo Acosta
Solo la magia del cine puede ser tan sublime para estar acompañado del maravilloso arte de la música, el alimentar una historia con el soplo profundo que tiene la melodía en sinergia con la poesía, es vida, y solo es posible a través de los sueños hechos imágenes… Las historias de amor, las películas políticas y la trascendencia social que llega al séptimo arte se detienen en la pantalla grande y se convierten fascinantes cuando el director de sonido con su musicalizador extiende sus manos dispuestas hacernos sentir emociones, hacer que la magia se vincule con nosotros y de las sillas no podamos levantarnos por tanto goce que recorre nuestro cuerpo, esperar que nunca se detenga el sentimiento y no responder al estimulo, no llorar, no reír y no revivir sentimientos es imposible, no tomar la mano a la mujer que nos acompaña en medio de tal éxtasis y no dar la caricia mas tierna a través del cine, es no haber visto buen cine y es no saber apreciar una buena mujer.
Solo la magia del cine puede ser tan sublime para estar acompañado del maravilloso arte de la música, el alimentar una historia con el soplo profundo que tiene la melodía en sinergia con la poesía, es vida, y solo es posible a través de los sueños hechos imágenes… Las historias de amor, las películas políticas y la trascendencia social que llega al séptimo arte se detienen en la pantalla grande y se convierten fascinantes cuando el director de sonido con su musicalizador extiende sus manos dispuestas hacernos sentir emociones, hacer que la magia se vincule con nosotros y de las sillas no podamos levantarnos por tanto goce que recorre nuestro cuerpo, esperar que nunca se detenga el sentimiento y no responder al estimulo, no llorar, no reír y no revivir sentimientos es imposible, no tomar la mano a la mujer que nos acompaña en medio de tal éxtasis y no dar la caricia mas tierna a través del cine, es no haber visto buen cine y es no saber apreciar una buena mujer.
Invito a salir a llenar las salas de cine, transportarse con el director e ir con la compañía de la mejor pareja, invito a que se den un espacio embriagues artística con una buena película… Invito a ver cine.